lunes, 23 de noviembre de 2009
Despertar masivo de la humanidad
jueves, 19 de noviembre de 2009
Una dirección, doble sentido.
martes, 7 de julio de 2009
Invocación
Que vacio le deja a uno un poema sin respuesta,
sin el menor indicio de haber sido recibido, acogido…
Volcar el propio sentir en palabras
y que estas sean derramadas en el olvido,
Tratar de alimentar un Círculo, o tal vez Espiral de amor,
de regar un jardín que quisiera creer nuestro
y descubrir que no existe tal cosa, que quizás nunca existió.
¿Qué era entonces aquel sentimiento que nos unió?
¿Cual fue el daño, donde se esconde el desierto de lágrimas?
Desierto infinito, impenetrable, imperturbable vacio
destructor acorazado, silencioso, implacable… ¡Maldito!
¿Dónde estás Amor? ¿Dónde estás?
¿Es solo que estas lejos? ¿O acaso eres un espejismo?
Yo te sentí, entre mis brazos, llena de amor, llenos de amor
Tan grande, tan lindo, tan poderoso… nos colmaba tanto
que podíamos regalarlo, amar también hacia fuera,
compartirlo y hacer del mundo un lugar mejor
sin miedo de agotarlo porque lo sabíamos infinito.
¿Cómo es posible que algo así muera?
¿Si merecimos ese regalo tan inmenso?
¿Por qué nos fue arrebatado?
Si no estábamos preparados para un amor tan hermoso,
para cuidar ese jardín, sembrarlo de flores y cultivar sus frutos,
¿Por qué nos fue concedido?
Yo te llamé, invoque al cielo tu presencia
y tu apareciste en mi vida con toda tu nobleza
como la más bella del mundo para mis ojos,
mas espléndida de lo que hubiese podido imaginar.
¿Acaso solo vi lo que deseaba ver?
Tal vez mis ojos no vean con perfecta nitided,
sin embargo la bendición nos fue concedida
¡Mi corazón jamás me traicionaría!
¿Qué ocurrió después?
la vida abrió su camino atravesándonos pero
¿Donde están nuestros hijos?
¿Murieron antes de nacer?
Nuestro amor era demasiado grande
como para ser el niño muerto
de aquel poema de Benedetti.
Quizás llego el momento de invocar de nuevo.
Amor! Vida! Corazón!
Imnensidad!
¡Guía nuestros pasos!
¡Alumbra nuestra senda!
¡Abre los caminos!
¡Derrama sobre nosotros tus bendiciones!
Concédenos el Amor y la capacidad para compartirlo,
para ser felices y engendrar vida y prosperidad en plenitud.
Concédenos la complicidad, la confianza, la ternura.
Concédenos un amor poderoso
que ilumine y sane nuestros rincones oscuros.
Que todo ocurra de la mejor manera para los dos
y que podamos comprender y recorrer los caminos.
¡Ruego por la paz en nuestras mentes y corazones!
¡Hágase tu voluntad!
Añoranza
que es el olvido
que la esperanza
de estar contigo?
que el engaño
que fue de verdad?
¿Que es miedo, defensa, egoísmo
que coraza, corazón
qué
el abismo?
¿Añoro acaso lo que nunca fue?
Te echo de menos...
pero no mas
de lo que te extrañaba antes,
siempre, casi todos los minutos,
cuando estábamos juntos.
Me acostumbre a vivir
a tu lado sin ti.
hecha de lagrimas sin derecho propio,
sin espacio para vivir,
sin un lugar en tu pecho inundado
para ser acogidas, consoladas,
transformadas en sonrisas y cariño,
se vertieron hacia dentro,
fueron calando y acallando,
ahogando mi amor,
tan lindo...
tan grande,
tan delicado.
que vuelve su llanto, su mirada
hacia un lugar pasado.
Porque añorar el tiempo de tu ausencia
aquel que sufriste a mi lado.
yo llegue a ser uno mas y a menudo
te peleabas con nosotros.
Al que bautizaste con mi nombre
solías decirle:
"¡No me ves!"
y es cierto, los fantasmas no ven...
ni dejan ver.
¿Cuando te has dado cuenta de que me fui?
Cansado de ser inexistente en tu bestiario,
de ser ignorado entre la maraña de sabanas,
cadenas y lastres de culpa y penitencia,
mi corazón reclamo su derecho a la vida,
al amor, a existir,
se inflo como una vela y el viento soplo
lo justo para dejarme aquí
si mas lejos
o mas cerca de ti.
antes incluso de asfixiarlo
confinándolo al recuerdo, a la nostalgia
al castigo de tu mirada de rabia y dolor.
anhelo que me veas,
que mires mas allá de tus viejos dolores
que me reconozcas como algo distinto
de tus pesadillas, de tus fantasmas...
porque yo me fui
pero ellos siguen ahí.
Quizás si te des cuenta de lo que no soy
sabrás lo que siempre sentí.
Ojala se desvanezca esa maraña envolvente
que transforma tu presencia
en ausencia para mi,
mi presencia
en ausencia para ti,
nuestro amor
en tristeza y añoranza.
viernes, 3 de julio de 2009
No puedo evitarlo...
¿Sera el movimiento lo que haga desaparecer la in-quietud?
¿Sera la in-quietud el sentimiento derivado de la resistencia al movimiento?
No puedo evitarlo,a veces también soy así...
jueves, 9 de abril de 2009
Love is in the air
martes, 7 de abril de 2009
Todas las historias de amor
Desconfianza
Desconfiar de mi mismo
y desconfiar de Dios
es lo mismo.
Siguiendo a mi cervatillo alado
Me quede solo en mitad de la nada
Si no puedo confiar en mi corazón
¿Cómo no caer en el abismo?
Desabróchate los labios
viernes, 3 de abril de 2009
Se abre el telón...Escena en el ultramarinos
(Se abre el telón. Están un tendero y una clienta en un comercio de ultramarinos)
Clienta: Póngame kilo y medio de Chomsky, tres cuartos de Baudelaire y de postre... me llevare algunos poemillas ligeros de esos que tiene ahí (señalando con el dedo) si de esos, sin mucho drama que estoy a dieta primaveral, y también... si mire, póngame también algunos chistes picantes al azar, que le dan mucha gracia a los entrantes.
Tendero: ¡Pero señora!
Clienta:¡De señora nada! ¡Señorita!
Tendero: (siguiéndole la corriente) Usted perdone señorita, pero no salgo de mi asombro y preocupación...No hace ni veinticuatro horas que se llevo dos kilos de documentales y textos varios sobre el 11S, medio kilo de Jackendoff y una docena de pasteles de Krishnamurti ¡Con lo que llenan esos "dulces"! ¡No puedo creer que ya haya devorado todo eso y este aquí de nuevo con esa cara de hambrienta!
Clienta: ...mmm...si, bueno...no vaya usted a pensar mal pero...
Tendero: ¿Se encuentra en apuros señora? ¡Perdón! Señorita, señorita...¿Le ocurre algo? Ya sabe que en mi puede confiar, no le diré nada a nadie que no sea cliente habitual...
Clienta: No, vera, no se trata de eso... es que...
Tendero: Pero cuente, cuente...
Clienta: Es que... Es que últimamente me embarazo con mucha facilidad.
Tendero: (ojiplático) ¡¿Cómo dice?!
Clienta: ¡Pues si! Y lo peor no es eso. Lo peor es que no se quien es el padre...
Tendero: ¡Pero que me está contando señora! Señorita, señorita...
Clienta: Aunque bueno...tengo mis sospechas...
Tendero: ¡No habrá sido el hijo del butanero! Si es que estos chavales jóvenes...
Clienta: No, no, se equivoca...
Tendero: Como se entere su padre.. Pobre chaval. ¡La que se le viene encima! Le va a caer una buena, por lo menos una de veinte kilos...
Clienta: que no, que no, que yo no...
Tendero: Si es que hay que ver como las gasta el butanero. Todavía me acuerdo de aquella vez que le intentaron timar en la cafetería...y ya ve ¡Por un eurillo de na´! ¡Pues ahí que va y le planta una bombona en mitad de de la barra! ¡Menudo boquete!
Clienta: ¡¡Baaasta!!
Tendero:¡Glups!
Clienta: Mis sospechas van en otra dirección...
Tendero: ¡No! ¡El Panadero!
Clienta: ¡Que no! ¿Pero me va a dejar hablar?
Tendero: Si, si, claro que si señora...señorita, señorita...
(Breve silencio y la mirada de la clienta se clava como dos cuchillos en los ojos del tendero)
Tendero: Por cierto señorita...¿Que hace usted esta noche?
Clienta: ¡¡¡Grrrrrrrrr!!!
Tendero: No, si a mi ni me va ni me viene...pero pooor preguntar...
Clienta: Pues yo creo que ha sido... (mira hacia los lados como para asegurarse de que nadie mas la oye) ...el Espíritu Santo.
Tendero: ¡Jajajajaajaajaja! ¡Si hombre! ¡Y usted es la Virgen María! Jajajajajajaaja!
Clienta: Se lo digo en serio. Además, yo hace tiempo que no... ya sabe. Bueno quitando el otro día que... pero eso ni le interesa a usted ni viene al caso.
Tendero: pues si que me intere...(la clienta le corta)
Clienta: Pues el caso que últimamente me quedo embarazada con una prodigalidad abrumadora, esta mañana sin ir mas lejos di a luz a tres.
(el tendero la mira atornillándose el índice en la cabeza pensando que esta loca de atar y sigue con sus tareas)
Clienta: No me mire así, hombre. Lo que pasa es que mis hijos son poemas.
Tendero: Si, si, claro ¿Le pongo alguna cosita más? (le pregunta mientras va a por del listín telefónico y comienza a buscar el numero del manicomio)
Clienta: Y eso lo explica todo, por eso tengo tanta hambre últimamente.
Tendero: ¿Le pongo también unas albondiguillas de extractos del Quijote? (Le da un paquete de chupachups para que se entretenga, coge el teléfono y llama al manicomio) Oiga! si, mire que tengo aquí una mujer que parece que anda un poco mal de la cabeza, dice que se alimenta de poesía y literatura... Ah, que la conocen (...) ¿Que se escapo hace una semana? ¿La ninfómana del pabellón B? (...) No, no tenía ni idea...bueno ahora que lo dice, el otro día me conto el panadero que, bueno... y también el hijo del butanero que había una chica un poco rara por el barrio que era un tanto alegre, usted ya me entiende. Si, si, no se preocupe que yo la entretengo hasta que llegueis los loqueros, perdón, los psicolocos...los como os llameis!
(El tendero cuelga el telefono y vuelve donde la clienta)
Tendero: mire señora...señorita, señorita... pase conmigo a la trastienda que le voy a enseñar unas ensaladas de aforismos que nos acaban de llegar...
(El tendero y la clienta entran juntos a la trastienda. Se baja el telón)
sábado, 28 de marzo de 2009
Alas
Ya se que tienes alas en la mente
y que tu corazon aun teniendo las alas rotas
prefiere saltar al vacio
que permanecer a salvo entre barrotes
pero...
¿Le salieron ya alas a tu cuerpo?
El contrato vital
Tengo una relación de amor-odio con el tiempo.
Nuestras peleas se parecen mucho
a las de esos jóvenes enamorados
demasiado ignorantes aun de su codependencia
como para siquiera pensar en superarla.
Siempre he sido un poco desastre
cumpliendo horarios, respetando plazos
o trenzando necesidades vitales con tareas.
Tal vez por eso he andado despistado por ahí
sin saber que yo también soy un “sin papeles”,
que mi contrato con la vida ha caducado.
Quizás por eso, en estas últimas semanas
la calavera de Hamlet, cual cobrador del frac,
me haya estado persiguiendo a todas partes.
Puede que suene a excusa de irresponsable pero
jamás pensé que pudiera existir un contrato con la vida
¡Que no fuera vitalicio!
Quien sabe si Dios no esté también en crisis,
reajustando ciertas cosas en su empresa divina,
extinguiendo algunas especies para reducir plantilla
o acelerando la maquinaria del tiempo en un intento
de optimizar de la conciencia el rendimiento.
En el periodo que va desde la cuna hasta la tumba,
en el que antes cada ser disponía de una sola vida
parece que ahora, sin previo aviso ni elección,
se instaure el tres por uno con ciertos requisitos:
quien quiera continuar en esta empresa de la vida
atravesara varias muertes con dolor y después
deberá renovar su contrato en cada renacer.
Hoy después de tener serias dudas al respecto,
al menos por esta vez, y sin que sirva de precedente,
tomo la firme decisión de renovar mi contrato:
“Asumo completamente,
con gratitud, alegría y amor
la responsabilidad de mi vida”
viernes, 27 de marzo de 2009
El atropello de la futilidad
¿Alguna vez te atropelló la futilidad y
reventó tus motores, o te dejo sin remos y a la deriva
en mitad de un océano de baldosa y asfalto?
Hoy me posee tal pasividad
que podría combatir cualquier argumento,
cualquier pensamiento o intención.
Porque ¿Qué sentido tiene nada?
Camino despacio, pausado e invisible
como impulsado por brisa breve,
como interrogante, vago trazo de pintor,
lienzo etéreo o pincel ausente.
Cada pisada escribe en el suelo:
¿Por qué existir?
¿Porque recorrer este camino a ninguna parte?
Uno a uno y sin que yo haga nada,
tampoco para evitarlo,
mis pasos se vacían de dirección.
Quietud.
¿Porque engañarse?
¿Por qué dar un solo paso mas sabiendo
que ningún destino existe realmente,
que nada permanece y que tampoco tu lo harás?
¿Qué sentido tiene enamorase si no es para siempre?
¿Qué sentido arrastrar esta cadena
sin crimen ni condena ni premio al sacrificio?
La inexorable deconstrucción de mi mismo
extingue toda intención, deseo o movimiento.
En mitad de este océano de baldosa y asfalto,
mientras otros cuerpos transitan indemnes,
salvados, por ahora, del atropello de la futilidad,
de saber que no existe estación de origen alguna
ni tampoco destino cognoscible que anhelar,
desaparezco.
Poco a poco, sin que yo haga nada,
tampoco para evitarlo,
se reanuda el caminar.
Futilidad.
Liviandad.
Paz.
Felicidad.
miércoles, 25 de marzo de 2009
Lección nº1:
(En respuesta a "No me educaron para amar")
Si destierras de tu territorio la necesidad vital
de contacto, afecto e intimidad,
ello permanecerá al acecho,
observando desde el otro lado de las montañas
esperando el momento en que tu tiránica mente,
en un momento de despiste o añoranza,
o quizás, de velada lucidez
como si de un lejano sueño se tratara,
tenga la vaga sensación de que
no existe palabra, acertijo o poema,
contundente "verdad espiritual"
o reconfortante encuentro verbal
que pueda colmar cierto espacio vacio
de paredes desoladas, arrancado a tiras
el empapelado de ausencias y temores.
Descubierta la vergonzosa herida sangrante
por donde se escapa la vida,
por donde aunque odie reconocerlo
también la mente, lamentando no ser omnipotente,
pierde a raudales el combustible de su poder,
su cordura se ve amenazada y con ello
la estabilidad de un imperio cimentado en muerte.
Vigas inertes, materiales estables,
conceptos plásticos como rosas de plástico
siempre bellas o pretendidamente bellas,
hermosas mentiras que como vampiros
absorben vida ajena para seguir existiendo.
La despiadada astucia de la dama de hierro
puede llegar incluso al auto sabotaje,
a lanzar aviones enemigos contra si misma,
derrocar sus torres de marfil justificando así
la necesidad de su hegemonía,
como en aquellas ocasiones en las que
alegando enajenación mental provocada por un beso,
por el contacto húmedo, desnudo, de tu cuerpo con el mío
pretende demostrar la terrible, lasciva peligrosidad
del encuentro carnal sin su permiso
y su perversa supervisión.
martes, 24 de marzo de 2009
El mal existe
lunes, 23 de marzo de 2009
La curva de la felicidad
¿Se comparte la tristeza,
aquella que ni siquiera uno mismo puede etiquetar?
Viaje hacia los adentros
¿Quien esta tan adentro de mi
que pueda presenciar este paisaje?
¿Es cuestión de intimidad
o es esta una tristeza solitaria?
¿Es egoísmo, miedo a ser un ente separado de la vida,
un acto de irresponsabilidad?
¿Una evasión de la parte del estar vivo
que habita bajo el eje de coordenadas?
¿ Es la felicidad una curva que al sumergirse en el océano
se ve refractada y parece separada de si misma?
Entre dos nadas
Me gusta el silencio
Me gusta el silencio
En el no es posible la mentira
En el puedo escuchar el sonido de tu ser.
Me gusta perderme en la última estación de tu mirada
encontrarme allí contigo y conocerte, conocerme.
Envueltos en el blanco silencio de las sabanas
jugando a cazar un beso,
en el penúltimo instante el tiempo se detiene.
Las mariposas que anidan en tu pelo
comienzan a revolotear, mi piel se eriza y
como brisa cálida o torrente inesperado
me inunda tu aroma de fruta
dulce, madura y aterciopelada.